Continuación del tema publicado en este post
He leído demasiado tarde la recomendación que hacía un usuario de IMDB sobre esta película:
''I don't recommend this as a film for anyone beyond film students and perhaps philosophers''. Yo ni siquiera se la recomendaría a un empresario cualquiera.
Este atentado lo han perpetrado 8 directores a los que algún desalmado les pidió que plasmaran en otros tantos cortos su particular visión del transcurrir del tiempo. El motivo por el que este grupo de cabrones, a los que alguien dio carta blanca para malgastar celuloide, rodase este manjar para intelectualillos con jersey de cuello vuelto, me resulta totalmente inexplicable pero desgraciadamente es demasiado común. La falta de comunicación entre espectador y obra, que debiese ser motivo de bochorno para cualquier artista, es celebrado por ese grupo de payasos elitistas que torturan al personal con sus ''visiones intimistas''. Es verdaderamente triste que estos creadores de "cine de autor" para seguir demostando su "libertad creativa" estén encadenados a películas de paso lento y argumentos repujados. Un movimiento en falso con forma de actor conocido o guión asimilable por buena parte del vulgo, y el director consagrado y underground es rápidamente etiquetado de comercial.
La primera visión que nos da el film ("Historias de agua") fue dirigida por Bertolucci. Es un cortometraje plano, predecible de principio a fin y con una inocencia que en ciertos momentos puede ser insultante. Es cierto que tiene algunos matices y comparándolo con el resto de historias, por lo menos esta mantuvo mi interés los 10 minutos que dura.
A partir de este punto las historias se desmadran en una orgía de imágenes aburridas y que no logran su principal objetivo, transmitir sensaciones (excepto de la sensación de tedio parece transmitida por bluetooh). Los tuertos, en este elenco de cortometrajes ciegos, son los dirigidos por Jirí Menzel ("One Moment") yVolker Schlöndorf ("The Enlightenment"). Ambos son el clavo ardiendo al que te aferras para no castrar al reproductor de video.
Esta onanística película tiene continuación con Ten Minutes Older: Trumpet, que me temo que se ha conformado con la misma plancha y cuya visión obviaré incumpliendo lo pactado con vosotros... pero uno tiene un límite.
Siguientes películas a comentar:
''I don't recommend this as a film for anyone beyond film students and perhaps philosophers''. Yo ni siquiera se la recomendaría a un empresario cualquiera.
Este atentado lo han perpetrado 8 directores a los que algún desalmado les pidió que plasmaran en otros tantos cortos su particular visión del transcurrir del tiempo. El motivo por el que este grupo de cabrones, a los que alguien dio carta blanca para malgastar celuloide, rodase este manjar para intelectualillos con jersey de cuello vuelto, me resulta totalmente inexplicable pero desgraciadamente es demasiado común. La falta de comunicación entre espectador y obra, que debiese ser motivo de bochorno para cualquier artista, es celebrado por ese grupo de payasos elitistas que torturan al personal con sus ''visiones intimistas''. Es verdaderamente triste que estos creadores de "cine de autor" para seguir demostando su "libertad creativa" estén encadenados a películas de paso lento y argumentos repujados. Un movimiento en falso con forma de actor conocido o guión asimilable por buena parte del vulgo, y el director consagrado y underground es rápidamente etiquetado de comercial.
La primera visión que nos da el film ("Historias de agua") fue dirigida por Bertolucci. Es un cortometraje plano, predecible de principio a fin y con una inocencia que en ciertos momentos puede ser insultante. Es cierto que tiene algunos matices y comparándolo con el resto de historias, por lo menos esta mantuvo mi interés los 10 minutos que dura.
A partir de este punto las historias se desmadran en una orgía de imágenes aburridas y que no logran su principal objetivo, transmitir sensaciones (excepto de la sensación de tedio parece transmitida por bluetooh). Los tuertos, en este elenco de cortometrajes ciegos, son los dirigidos por Jirí Menzel ("One Moment") yVolker Schlöndorf ("The Enlightenment"). Ambos son el clavo ardiendo al que te aferras para no castrar al reproductor de video.
Esta onanística película tiene continuación con Ten Minutes Older: Trumpet, que me temo que se ha conformado con la misma plancha y cuya visión obviaré incumpliendo lo pactado con vosotros... pero uno tiene un límite.
Siguientes películas a comentar:
- Capote
- Garden State- Ten Minutes- Jarhead
- Rojos
- El beso de la mujer araña
- Filantrópica
2 comentarios:
Si me permites la obviedad, creo que tendrías que ver muchísimo más cine antes de llamar grupo de cabrones a directores de la talla de Bernardo Bertolucci, Jean-Luc Godard o Michael Radford.
O mejor, dedicarte a ver películas del estilo de Rápido y Furioso.
O dejar de ver cine y punto. El jazz -por otra parte- se te da bien.
Lo indudable, es lo acertado del titulo de tu blog, al menos en lo que respecta a cine.
Realmente no es cuestión de ver mucho o poco cine, es de que te toque lo que ves. Desde mi ignorancia hay gente que consume marcas cinematográficas como "Bertollucci", "Jean-Luc Godard",... como quien es adicto a "Prada" o a "Carolina Herrera". Si a tí este tipo de cine te toca, genial...si sólo es fruto de un empacho de celuloide...sal de frutas amigo!
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